Desde sus inicios el cooperativismo a adoptado la educación como el pilar del desarrollo de las entidades de economía social y solidaria, a tal grado que la han denominado la regla de oro, pero a lo largo de los años los organismos de integración mundial, ACI, CCC-CA, entre otros han enfatizado más en que las cooperativas su éxito dependerá de la implementación de la educación, en todas las esferas.
La evidente muestra de lo dicho anteriormente, es la implementación de un programa de capacitación especial denominado “Carrera Dirigencial”, que no es más que la especialización de los miembros, en todas las áreas del cooperativismo, que trae consigo la oportunidad de dirigir de manera eficiente, este proceso se asume con la intención de no vulnerar ni los derechos que el asociado adquiere al momento de cumplir su proceso de membrecía.
Si bien es cierto en las cooperativas todos los socios poseen el mismo derecho y los mismos deberes, fruto de ese proceso democrático e incluyente es que como todos tenemos el derecho a elegir y a ser elegidos, los cooperativistas hemos tratado de implementar procesos por los cuales todos y cada uno de los socios puedan perfectamente ser directivos y de hay es que parte que como administraremos recursos de todos debemos perfeccionar el personal que nos dirigirá, dotándolo de las herramientas y los conocimientos para que la estadía dirigiendo sea placentera, tanto para el dirigente como para los asociados.
También esto ha permitido al cooperativismo un mayor entusiasmo de sus asociados por adquirir los conocimientos fundamentales para poder optar por los puestos de dirección y control de la empresa en la cual es co-propietario, sirviendo de fortalecimiento tanto institucional como personal de sus miembros.
Demostrando que el cooperativismo es una gran familia, una familia que te permite ver las cosas en varias vertientes, en un momento puedes ser dirigente y en otro solo asociado, pudiendo así, diferencia cuando estas en un puesto de toma de decisiones y en otro momento como un miembro común que observa las tomas de decisiones.
Luego de observar todo este avance del cooperativismo, que proporciona más eficiencia, mayor eficacia y más frugalidad en sus procesos, podemos decir que la implementación de esta modalidad o estilo de vida de los cooperativistas, deja como enseñanza más importante:
1ero. Que la educación es la mayor fuente de riqueza de los seres humanos, que solo hay que buscar la manera de desarrollar los potenciales de cada individuo.
2do. Que el cooperativismo en su proceso de desarrollo ha logrado hacer los aportes necesarios para que los seres humanos que en el convergen sientan que cada persona tiene un potencial, que solo hay que ponerlos a prueba. Después de poder palpar todo el desarrollo del cooperativismo, tanto en lo social, como en lo económico, nos lleva a la reflexión de que es la mejor herramienta descubierta en nuestra humanidad, para el crecimiento y evolución de los individuos.
Esta es una doctrina perfecta, ya que reúne una serie de caracteres que llevando al pie de la letra nos demuestra cada día más que viene extraída del hijo del hombre (Jesucristo), porque nos enseña a la unidad, el respecto, la igualdad y sobre todas las cosas la confraternidad entre las personas.
Comenta con Facebook