PUNTA CANA. El Consejo Nacional de Cooperativas da a conocer el documento de CONCLUSIONES y RESOLUCIONES de la IX Convención Financiera del Cooperativismo Dominicano y VI Internacional, aprobado a unanimidad por las y los delegados acreditados.
El evento ha sido el Gran Reencuentro Presencial del Cooperativismo Dominicano tras un ano y ocho meses de enclaustramiento y comunicación virtual, por los efectos de la pandemia. Los dos eventos, se montaron de la forma mas completa y feliz: con estos dos eventos a los que acudieron en total 598 personas. Todas las fotos que ilustran esta publicación, como las de las otras publicaciones en elcooperadordigital.com son un aporte de COOP-HERRERA/Breilyn Brito.
Estas son las conclusiones y recomendaciones:
En la IX Convención Financiera del Cooperativismo Dominicano y VI Internacional, principal evento de formación de los cooperativistas dominicanos, desarrollado sobre el tema “Sustentabilidad de Negocios Solidarios Recipientes en Tiempo de Disrupción”, en la cual participaron delegaciones de las siete federaciones cooperativas del país y delegados y conferencistas y facilitadores de Italia, España, Inglaterra, Guatemala, El Salvador, Honduras, Puerto Rico, Costa Rica, Panamá, México, Colombia, Perú, y Venezuela.
Destacamos que las cooperativas de la República Dominicana generan más de 100,000 empleos directos, 580,000 empleos indirectos, 50.5% son hombres 49.5% son mujeres, equivalente al 13% de empleos del país, generamos el 15% de la producción de caña de azúcar, 12% producción de arroz, 80% producción de pollos, 62% producción de cerdos y 47% producción de café.
Enfatizamos que el Sector Cooperativo Dominicano está en capacidad para enfrentar los retos y desafíos del presente y proyectar con trabajo dinámico el futuro, de cara a dimensionar la producción agroalimentaria nacional.
Reconocemos que el que el sector cooperativo necesita una regulación moderna que supere una legislación que ya cumple 60 años de antigüedad, planteando la necesidad acertada de la necesidad de una regulación del Sector Cooperativo Dominicano con efectiva supervisión y fiscalización de las operaciones.
Reconocemos que es necesario una supervisión moderna pero apegada al perfil social/empresarial del sector cooperativo, que se diferencie de la banca por su carácter de propiedad de cada uno de sus socios, el cual posee un potencial financiero y económico extraordinario, que las cooperativas requieren una regulación actualizada de sus operaciones.
Destacamos que las cooperativas brindan soluciones habitacionales, comercio y salarios justos, empleos dignos, innovación, transformación digital, emprendurismo y generación de riquezas.
Destacar que República Dominicana cuenta con más de:
- 2 millones de socios,
- 1,800 cooperativas,
- más de 214 mil millones de pesos en activos, que contamos con la participación de género,
- Que representa el 22% del sistema de participación del sistema financiero, apoyo a los sectores vulnerables
- ofreciendo más de 3 millones de soluciones anuales a sus socios y familiares, ofrecemos educación en el ahorro, contamos con tecnología de punta, recursos humanos altamente calificados, manejamos el nuevo modelo de gestión,
- más de 1,500 millones de pesos en Responsabilidad Social, invertimos
- 600 millones de pesos en educación, tenemos redistribución de recursos y en las comunidades con desarrollo local.
La República Dominicana atraviesa por un período excepcional de transformaciones políticas, institucionales, económicas, culturales, sociales y sanitarias; proceso que acumula diferentes posiciones y evidentes contradicciones, así como expectativas insatisfechas dentro de una gran cantidad de sectores de la sociedad.
Por lo cual en el marco de la IX Convención Financiera del Cooperativismo Dominicano y VI Convención del Cooperativismo Internacional,exponemos las siguientes resoluciones:
Pobreza:
Resolución: 1
Crear acciones desde las cooperativas en un primer nivel para la implementación pequeñas mejoras, en un principio, vinculadas entre sus asociados y la organización, en el segundo nivel, ofrecer servicios empresariales comunes y en el tercer nivel continuar con la representación política, proposición legislativa, estudios económicos y sociales.
Auditoría integrada operativa y financiera.
Resolución: 2
Motivar que en nuestras cooperativas se ejecute un cambio de enfoque para la mejora de controles de procesos internos con la implementación de sistemas de auditoría continua, lo que permitirá velar por el cumplimiento e impulsar el desempeño de nuestras empresas.
Gestión de riesgos integrales en cooperativas para enfrentar retos y desafíos tras covid-19”.
Resolución: 3
Provocar, que en cada una de nuestras cooperativas se fomente una línea clara de colaboración y comunicación entre la alta dirección de la cooperativa, equipo de cumplimiento, comité de riesgos y auditores, implementando las políticas que permitan prevenir y controlar el riesgo y a la vez crear mecanismos que fortalezcan la cultura de gestión y administración de riesgo, alineando el plan de gestión de riesgos a la nueva realidad con la definición de nueva estrategia de gestión de riesgo, creando políticas integrales del sistema de auto control y gestión del riesgo.. asumiendo el compromiso de los actores estratégicos en la definición, planificación y gestión del riesgo integral.
Incidencia política, relaciones con el estado y organismos de integración:
Resolución: 4
Alinear nuestras estrategias con la política pública gubernamental, establecer relaciones de lealtad con los funcionarios que dirigen las estructuras de gobierno.
Gestión, Gobierno, Gobernanza, gobernabilidad
Resolución: 5
Fortalecer la gestión de gobernabilidad y de negocio bajo la nueva normalidad, estableciendo y definiendo las funciones correspondientes, logrando que los integrantes de cada organismo de supervisión y control y los funcionarios ejecutivos comprendan y asuman los roles que les corresponde para el logro de los objetivos de sus cooperativas.
Resolución: 6
Considerando los rasgos de la identidad cooperativa, su doble dimensión social y económica, se precisa que las cooperativas tengan bien definidos su gobierno, gestión, gobernabilidad y gobernanza, PLANTEAMOS, la reflexión acerca de sus lineamientos estratégicos estén bien definir, valores, misión, visión y objetivos, se desarrollen ideas, acerca de las pautas del buen gobierno cooperativo.
Resolución: 7
Promover desde el CONACOOP, la importancia de satisfacer las necesidades financieras de los asociados en el contexto actual, en el entendido que se requiere un esfuerzo que permita ofrecer servicios financieros eficientes por canales de atención digitales y presenciales que permitan prestar una experiencia consistente y que para ello se requieren capacidades blandas y técnicas especializadas en los equipos de trabajo, conduciéndonos a la transformación digital en nuestras empresas cooperativas.
Resolución: 8
Apegándonos al principio solidario y colaborativo RESOLUTAMOS, aunar esfuerzos conjuntos que permitan eficientizar costos y generar economías de escala, instando a reclutar un equipo que tenga experiencias de usuarios, que les ofrezca servicio a todas las cooperativas, con miras a la creación de las súper aplicaciones.
Resolución: 9
Investigar, documentar y publicar sobre las acciones que visualicen la equidad de género desde las instituciones cooperativas, en donde se creen políticas claves de protección y desarrollo de las mujeres y niñas, promoviendo la equidad de género como herramienta fundamental. Además, motivar la participación política de la mujer en los estamentos de toma de decisiones en igualdad de condiciones, continuando con los programas de empoderamiento de la mujer y la creación de estrategias de genero alineadas al plan estratégico institucional
Resolución: 10
Declaramos el cooperativismo como líder en la divulgación y la exigencia del cumplimiento de la triple transición: social, verde y económica, que el nuevo tiempo pos pandemia nos exige. La economía de los cuidados, la inclusión de los grupos vulnerables, la vivienda, la energía, el consumo, la digitalización, el emprendimiento y el empleo digno, los cuales deben ser temas prioritarios en este tiempo. La justicia Social, protección al planeta y una vida digna los pilares de nuestra casa llamada tierra.
Resolución: 11
En el entendido que la renovación generacional exige procesos rápidos, eficientes, que estén apoyados en las herramientas modernas que existan, RESOLUTAMOS, la integración de jóvenes cooperativistas en los trabajos de la transformación digital.
Resolución: 12 Desde el CONACOOP como órgano de integración RESOLUTAMOS: Velar por la apertura y reconocimiento del estado en cuanto crear los mecanismos institucionales para articular al sector cooperativo a las políticas públicas como estrategias de las cooperativas, hacer negocios y aprovechar el desarrollo entendido como bienestar de las personas y las comunidades, priorizando estas dos estrategias, seguridad alimentaria y vivienda.
Resolución: 13
Desde CONACOOP, RESOLUTAMOS articular procesos de concertación y amplio consenso con Federaciones y Cooperativas para que sea apoderado el Congreso Nacional, a través de legisladores cooperativistas, del Proyecto de Código Cooperativo Dominicano, a realizar adecuada incidencia pública y privada hasta lograr el nuevo marco legal regulatorio especializado.
Resolución: 14
Generar desde el CONACOOP, una alta reflexión sobre la contribución del cooperativismo a la sustentabilidad de los negocios solidarios resilientes en tiempo de disrupción, en el entendido de que el cooperativismo es fundamental para mitigar parte de los serios problemas que ha profundizado el SARS-CoV-2 a causa del COVID-19.
En conclusión:
La sociedad de hoy avanza y el cooperativismo trasciende como la única vía posible de garantizar al individuo, igualdad, libertad y solidaridad. Solo es posible, sostener el modelo cooperativista basado en su filosofía y esencia ideológica.
Ante el fracaso del modelo económico neoliberal, el cooperativismo y la economía social, constituyen una vía esencial para el desarrollo social incluyente de los pueblos.
El cooperativismo en la República Dominicana acumula casi ocho décadas de historia en su etapa contemporánea. Las cooperativas se insertaron en actividades económicas, no por una oportunidad lucrativa de mercado, sino para favorecer los intereses y la atención de necesidades de personas de diferentes sectores, gremios y comunidades.
Dentro de la filosofía del cooperativismo, el factor humano deja de ser un medio, para convertirse en la finalidad máxima por la que se constituyó la empresa. En otros modelos empresariales, las personas son el medio para obtener los fines económicos de la empresa.
Se trata de valores que inspiraron el interés general, la movilidad y la promoción social por encima del individualismo liberal, permitieron a la ciudadanía a través del cooperativismo, incorporarse en la solución de sus propios problemas en múltiples actividades de la sociedad.
En el cooperativismo las acciones en la gestión educativa y acompañamiento técnico, se convierten en un principio fundamental para su sostenibilidad, por estos medios se logra la tecnificación y especialización de la actividad cooperativa, así como la mejora de las competencias de los ahorrantes y productores cooperativistas. El cooperativismo es una aliado natural para la generación de empleo, la recuperación económica y el desarrollo sostenible.
Para la recuperación económica debemos fortalecer la identidad y naturaleza del cooperativismo a efectos de aclarar el carácter doctrinal para la visión de incidencia en las relaciones Estado – Cooperativismo
Se deben estimular las alianzas públicas y solidarias a efectos de contribuir en la cadena de servicios del Estado desde la acción cooperativa.
Debemos fortalecer la claridad estratégica y práctica de los gestores en las organizaciones cooperativas para ser actores influyentes en el proceso de recuperación económica.
En la nueva normalidad se debe promover acciones para estimular la economía de la solidaridad y del humanismo colectivo, tal y como señalo el Papa Juan Pablo II:
“La solidaridad no es un sentimiento superficial, es la determinación firme y perseverante de empeñarse por el bien común”.
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